Mientras que los de Berizzo llegan tras una no muy buena racha de resultados, 2 puntos de los últimos 12 posibles, el equipo entrenado por Pepe Mel afronta el partido con una dinámica positiva. Desde que el madrileño se sentara en el banquillo de Riazor, el pasado 2 de marzo, los coruñeses no conocen la derrota (2 victorias y 2 empates, en el que se incluye el partido aplazado de la jornada 21 ante el Real Betis).
Después del 4-1 con el que los vigueses ganaron el duelo de la primera vuelta, el Deportivo llega con ganas de "revancha"; y es que el triunfo ante el FC Barcelona ya está olvidado para los blanquiazules. Y así lo indicaba Germán Lux cuando le preguntaban sobre el partido: "Seguro que la afición prefiere ganarle al Celta que al Barça. (...) Los que llevamos tiempo aquí sabemos lo que significa este partido, sobre todo para la afición. En el último derbi la imagen no fue buena, hubo una derrota dolorosa y queremos revertir la situación".
Celta y Dépor llegan al duelo en "desigualdad" de condiciones. Y es que, mientras que los pupilos de Pepe Mel tienen toda una semana para preparar el choque, el Celta tiene que viajar a Rusia para enfrentar la vuelta de octavos de final de Europa League. El Toto Berizzo y sus hombres tendrán que defender el 2-1 cosechado en el partido de ida en Balaídos si quieren estar en el sorteo del viernes. Tras su vuelta a Vigo, el equipo dispone de dos sesiones preparatorias para el partido del domingo en Riazor.
Ambos equipos enfrentan el partido con bajas. Mientras que Pepe ha perdido a Fernando Navarro (acumulación de tarjetas), y tendrá las dudas de Sidnei y Guilherme, Eduardo Berizzo no podrá contar con Marcelo Díaz (baja para varias semanas) ni con Rubén Blanco. Además tiene tambien la duda de Pablo Hernández, quien se probará en los entrenamientos precedentes al partido.
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